“El tema inflacionario es muy duro”, sentenció Grinman; a la par que advirtió que “si bien la Argentina está acostumbrada porque lleva 80 años de 2 o 3 dígitos de inflación, hablar de un 95% es crítico”. Y en tal sentido destacó el “enorme poder de resiliencia” del sector empresario.

Por otra parte, se refirió al desabastecimiento que implica el cepo a las importaciones, considerando que más del 80% de lo que se importa en el país son productos necesarios para la producción nacional.

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En esa línea, hizo mención a la reciente encuesta realizada por la CAC para relevar la situación actual y las dificultades que atraviesan las empresas en relación al nuevo Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA).

La investigación arrojó que el 93% de los encuestados experimentaron una reducción del stock y las ventas a partir de estos obstáculos.

Grinman también se refirió al flamante Indicador de Consumo (IC) que, recientemente difundido por la entidad, se sumó a otros relevamientos de elaboración propia como lo son los informes de venta ilegal callejera, de locales vacíos y de intercambio con los principales socios comerciales del país, entre otros.

“Apuntamos a que nos dé alguna información más. Para los que estamos en el mundo de los negocios, tener la información precisa es importante”, detalló.

Por último, el titular de la CAC manifestó que sus proyecciones para 2023 son similares a las de 2022. Sin embargo, se mostró optimista de cara al futuro, y en esta línea mencionó la próxima finalización del gasoducto de Vaca Muerta, que “podría tener una incidencia significativa en la generación de divisas”.